Platón Sánchez, Ver.- En lo que va del año se han aplicado diez aumentos a los precios de gasolina, gas y diesel, advirtió el dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) Pedro Salas Argüelles, quien precisó que ello incidirá en un aumento general de costos y afectaciones a la producción agrícola.
"Lo que más nos preocupa es el diesel, combustible que requieren los campesinos para la actividad agrícola. El Gobierno dice que sólo son diez centavos los que se aumentan, pero se le olvida que van diez aumentos y complica más la producción".
Además, suben los alimentos, transporte, fertilizantes y el uso de la maquinaria agrícola. Lamentó que en vez de frenar esa carrera, Hacienda anunció que los incrementos seguirán a lo largo de 2011.
De ser así, se borra el subsidio al diesel agropecuario, señaló que todo parece indicar qué se pretende, liquidar a los pequeños productores que siembran para autoconsumo, que ni tienen más arriba de una hectárea y que de milagro cultivan sus tierras".
Asimismo, se prevé que con esa "política equivocada" se condena al desempleo a los ingenieros agrónomos que salen de las universidades y tienen que emplearse como taxistas y hasta albañiles, a pesar de contar con una especialidad que se desperdicia.
En lugar de que el Gobierno Federal impulse a los egresados de las carreras profesionales, ofreciéndoles trabajo en cada uno de los ejidos de este país, "se esté dando al trasto con esa inversión pública que implica la formación de alumnos".
Comentó que hoy en día, a pesar de ser productor petrolero, México vende la gasolina tan cara como en Estados Unidos, pues un litro de este combustible cuesta lo mismo que un litro de leche.
Las autoridades federales pretenden homologar los costos del vecino país con el nuestro, lo cual es un contrasentido, porque las condiciones económicas y los salarios son diferentes, aparte de que allá los campesinos reciben altas cantidades para el subsidio de sus actividades, citó el dirigente Salas Argüelles.
Más de 20 millones de trabajadores rurales resultan afectados por los aumentos al combustible agrícola, lo que, encima, incide en los costos de producción que pagan los consumidores finales.
Fuente: Diario de las Huastecas.
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