Futuro…..centralidad progresista

Alguien,sí es de Platón  Sánchez, ha de conocer a este Señor:

Raymundo Flores Bernal DESDE LA HUASTECA “EL RETIRO”

Clases medias, quien las pierda, pierde. Interior de los partidos. “Jefazos”, “coroneles”, “perrada”. Me parece que los electores provenientes de la clase media serán los que en el futuro definan el rumbo del país, en el sentido de que favorecerán a aquellos partidos y personas que como gobierno perciban, como los que puedan atender y resolver “sus” problemas y concretar sus expectativas de ascenso en el bienestar material con empleo y oportunidades de avanzar económicamente en un marco de libertades democráticas y seguridad, tanto pública como jurídica. Así ha ido ocurriendo en las democracias más avanzadas del mundo y por lo general, alternativamente orientan su impulso hacia una centralidad formal o de facto y un bipartidismo con frontera permeable –centro izquierda-centro derecha; no conozco ningún país donde actualmente prevalezca una dictadura de cualquier signo, salvo los casos excepcionales que convalidarían la regla, de Cuba y Corea del Norte con regímenes y gobernantes tiránicos; en el primer caso los más largos de la historia contemporánea y probablemente de la historia de la humanidad.   Como en casi todo el mundo desarrollado o en vías de desarrollo también en México la población va concentrándose en un proceso acelerado en las ciudades…..es decir crece el electorado urbano, allí en lo general tiene más servicios y oportunidades, también casi siempre más información, intercomunicación, educación….lo que le acuerda algo como una vacuna contra la manipulación mediática, el trato autoritario y el clientelismo electoral.   El esquema histórico, también vivido en México, de apoyarse electoralmente en una ciudadanía rural, ignorante, desinformada y pobre o en una clase obrera presa de un sindicalismo coptado, autoritario y verticalista va modificándose incesantemente y estos segmentos pierden su importancia cuantitativa en las justas electorales, misma que ceden a segmentos emergentes de trabajadores libres, profesionistas, empleados del sector de servicios, pequeños empresarios, etc.   Eso creo que ha pasado recientemente en México; cuenta mucho en la explicación de la pérdida del poder público del PRI en el 2000 y de la apretadísima derrota electoral de la izquierda personificada por Andrés López Obrador en el 2006 en que el desdén por la clase media, por los empresarios, por los que no son pobres con esperanzas providencialistas pasó la factura de su temor social y por eso prendió bien aquello del “peligro para México” que con absoluta honradez millones percibieron así.   Pienso que para el futuro este esquema se consolidará, se hará más claro y firme……el partido, PAN, PRI o PRD, que pierda a las clases medias tiene altas probabilidades de perder también la elección del 2012, de perder el poder…..y detrás, la riqueza, las prerrogativas, la seguridad de sus cúpulas cada vez más ensoberbecidas y minusvaloradas por la gran “opinión pública”.   ¿Porqué tiene tanto peso la clase media?....creo que porque es la porción nuclear de los liderazgos políticos y tiene una especie de conexión vascular por un lado con los pobres y más pobres con los que interactúa y conduce muchas veces social y políticamente (analícese el perfil de todos o la mayoría, de los diputados, senadores, gobernadores y presidentes municipales del país) y por otro mantiene capilaridad con ricos de las grandes empresas y las cúpulas financieras que la requiere cada vez más rica y compradora, consumidora y por lo tanto la cuidan, miman, impulsan, apoyan políticamente con recursos materiales.   Por otro lado en el interior de los partidos el segmento importante es también un estrato intermedio, me tomo la licencia de llamarlo “los coroneles” están debajo de los “jefazos” o el “jefazo” y arriba (ofrezco disculpa por la malsonancia del término coloquial) de la “perrada”, ellos han decidido, deciden y decidirán la orientación de sus partidos, sus victorias o derrotas, sus avances o retrocesos, según los traten bien o mal, los promuevan o los aplasten.   Para citar ejemplos recientes muy vivos todavía….en el PRI en el 2006, para plantearlo con un simplismo deliberado en aras de una comprensión rápida el “jefazo” Madrazo “pisó muchos callos” de coroneles y éstos, no tanto las bases, le voltearon la “perrada” y perdió.   El presidente, el “jefazo” Fox quiso imponer a su sucesor y lastimó a los coroneles del PAN, los dividió, se concertaron y sacaron a su propio candidato a quien sostuvo la “perrada” panista y triunfó en 2006.   El super “jefazo” López Obrador atropelló poseído por la megalomanía a las cabezas de ciertas tribus e ismos del PRD, de la izquierda, resaltadamente al Cuauhtemismo y una porción sustancial de coroneles orientaron la divisa de su derrota sobre todo por omisión y lo dejaron con altísima improbabilidad de una segunda oportunidad; tanto a él y como rebote a una izquierda conspicua lamentablemente ausente hasta ahora en los hechos en la conducción de la República.   Guardada la proporción pienso que así va a ocurrir en todos o en la mayoría de los estados que tienen elección este año…..todo avorazamiento y dureza del “jefazo” en turno en cada entidad, de cualquier partido, que desdeñe, que deje de lado a los coroneles, que no los deje pasar a la fiesta, que no los deje participar en el reparto, creo que inevitablemente tendrá el reflejo de la “patada” como tras un tiro de arma de fuego…..previsiblemente en forma abierta o sigilosa van a orientar a la “perrada” a modo y encontrarán sus espacios, su porción de poder, en presidencias municipales y diputaciones locales dentro de su partido o de otro que los “cache” que para eso hay pluralidad y opciones abiertas, protegidas por la ley y socorridas por la habilidad política de ese estrato intermedio de los partidos.   Existe una sola estrategia anti desbandada, es clara, vieja, conocida, eficaz, fácil….negociación, respeto, diálogo, participación justa, convenida.   Ni que fuera tan complicado….o inédito.   Tiempos veredes.